jueves, 15 de octubre de 2009

Una Telenovela llamada Eliminatoria (1 de 3)


I. Del ingrato entorno


La geografía futbolera no siempre concuerda con la establecida por fronteras políticas o naturales.

Un pais escaso en territorio y gente como lo puede ser Uruguay no sólo ha ganado campeonatos mundiales sino legado a la historia del futbol leyendas como la de Varela, el Manco Castro o Francescoli. Ante el palmarés futbolístico que presumen los charruas nada pueden presentar los 1000 millones de chinos o hindúes.

Las eliminatorias mundialistas son el escenario del encuentro entre diferentes propuestas fubolisticas. Así, tenemos que los irlandeses tienen que hacer maletas y viajar a lugares remotos para ellos como lo son Georgia o Kazhakstán. Los nipones juegan bajo el abrasante calor en Omán y en Malawi se recibe a sudaneses, argelinos o ghaneses.

Con el paso del tiempo, las eliminatorias mundialistas han pasado del exotismo al morbo nacionalista. De pronto, los equipos de Holanda e Inglaterra se ven sorprendidos por los noruegos y tienen que pelearse por un boleto, nor y sud coreanos se ven las caras en el grupo de la muerte, egipcios y argelinos se rompen el cheeto por la última oportunidad de alcanzar el mundial y en sudamérica todo el mundo espera que pierda el equipo de Maradona para tirarle carrilla.

Quiso el destino que la selección mexicana disputara sus encuentros en una zona futbolera muy poco atractiva, los equipos de Guatemala o Nicaragua no son lo suficientemente "exóticos",  el futbol que se juega es tan pobre y los lugares destinados por la FIFA tantos  que la clasificación es algo seguro.

Afrontémoslo, ver a Cuauhtinflas hacerle túneles a un fontanero de la isla San Vicente que en sus ratos libres juega futbol, no es un acontecimiento que arrastre a los mexicanos a pagar 400 o 500 varos para entrar a La Jaula de las Locas, ejem, perdón, quise decir "el Aztekeeeee".

Cierto que la mayoría de nuestros compariotas  se pondría frente a la tele para ver dicho partido, pero la verdad es que, estamos tan enajenados que, de cualquier manera, y pongan lo que pongan, nos ponemos a ver la tele. Más bien son pocos los empresarios que "arriesgan" su inversión para pagar anuncios durante la transmisión de dichos encuentros ante equipos de islas tan minúsculas que resultarían apenas capaces de albergar una colonia de Fecalitos.

En mi opinión, para compensar esta ingratitud geográfica, el equipo nacional, de un tiempo acá, ha desarrollado lo que llamo "el Síndrome Telenovelero", un estado de estupor  tal que le lleva a ver a las selecciones nacionales de Trinidad, o el Salvador como rivales peligrosísimos, los cuales, como villanas neuróticas de telenovela, se interponen entre ellos y ese escurridizo galán llamado Mundial.

Claro, todo esto no es más que un debraye, suponer tratos y manejes escabrosos entre la Tele y la Femexfut para hacer las cosas más emocionantes y así tenernos como idiotas ante la tele con tal de ver como el equipo de todeeeees pierde con Honduras ó golea al de El Salvador, es algo que escapa a la realidad y tiene cabida en este blog, junto a jaladas como lo son Sugar Baby Love,  Gustafi ó  el Torneo de Liga Invierno-invierno Yavasquechutas  83 -84

2 comentarios:

  1. Uy y que pasara en el siguiente capítulo???? jajajaja. Puedes creerlo qe SOfia y yo vimos el primer tiempo del partido, y lo más interesante fueron los nueve minutos de abejas. :P

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